Nov 13, 2010

lo llano


Cuando nazca quiero ser un sotaco simpático y desparpajado. Con la cabeza grande y el cuerpo pequeño, compacto, bien musculoso. Renguearé un poco y tendré un ojo más abierto que otro, la voz y la barbilla rasposas y los dedos cortos y gruesos. No seré parte de ningún grupo de señoritos y esos hombres refinados que no son hombres. Seré varón y macho y hombre y tipo, con los pies bien grandes y feos. Lo poco que coincidiera mi apariencia con el estereotipo de los espectaculares estará compensado por la consistencia permanente de mi personalidad de pirata urbano. No se pondrá en duda quién soy ni por mí ni por nadie, no habrá duda de que soy quién soy y no soy otro.

Me presentaré contenido y consecuente. Conciente del teatro de la vida y bien despreocupado de la no trascendencia de las cosas. Hablaré lo que piense sin tiempo alguno entre ambos procesos. Tendré una mujer lacia que no podrá ver con claridad casi nada, más que yo soy el hombre que la tiene y que es tenida. Será liviana y risueña, sin dimensiones, animal y automática.

Seré plomero u otro oficio sin cerebro, preocupado sólo por las válvulas y coples, soldar, desoldar, atornillar y abrir la llave. Gran distancia me separará del mundo y la vida será trabajar para comer y comer para trabajar. No tendrán sentido las dudas o contemplaciones, y al cerrar los ojos de noche no pensaré nada porque caeré en un sueño profundo y plano sin poder siquiera darme cuenta de que he perdido la conciencia.

No comments:

Post a Comment